Proyecto Lina Rodriguez

Además de recoger las botellas plásticas con mis sobrinos, vamos a realizar una actividad creativa y educativa: vamos a reutilizar esas botellas para fabricar alcancías y materas. Esta iniciativa tiene como objetivo enseñarles que el reciclaje no solo implica separar residuos, sino también darles una nueva vida útil a los materiales. Al convertir las botellas en objetos decorativos y funcionales, los niños podrán comprender de forma práctica cómo reducir el impacto ambiental a través del reúso. Esta experiencia también les permitirá desarrollar habilidades manuales, estimular su creatividad y fortalecer valores como la responsabilidad, el cuidado del entorno y la conciencia ecológica. Con estas pequeñas acciones, buscamos sembrar una semilla de cambio que motive a otros a sumarse al compromiso por un mundo más limpio y sostenible.

En este momento, voy a salir con mis sobrinos a un sector cercano para recoger botellas plásticas y otros residuos reciclables. Esta actividad no solo nos permitirá contribuir directamente a la limpieza del entorno, sino que también es una oportunidad valiosa para concientizar a los niños sobre la importancia del reciclaje. Quiero que comprendan que reciclar no es solo una acción individual, sino un compromiso colectivo que tiene un impacto muy positivo en el medio ambiente. A través de pequeños gestos como este, podemos ayudar a reducir la contaminación, preservar los recursos naturales y fomentar un hábito responsable que beneficie a las futuras generaciones. Además, espero que esta experiencia práctica despierte en ellos el amor y respeto por la naturaleza, y que se conviertan en agentes activos del cambio hacia un planeta más sostenible.